Estos días tenemos todos los planetas visibles al amanecer, un poco separados en el cielo pero todos al alcance, podemos abarcarlos de un solo vistazo.
La expresión "alineación" solo hace referencia a que parecen estar todos conectados por una enorme línea invisible que recorre el cielo de este a oeste. En realidad los planetas se ven en una franja concreta del cielo (eclíptica) debido a que viajan en sus órbitas, estas están confinadas en un plano, el de nuestro Sistema Solar, y visto desde la Tierra parece una autopista. Por esto es fácil que estas alineaciones se den con frecuencia. Lo que es un regalo es poder ver a todos los que son visibles a simple vista de una vez.
Esta madrugada hemos podido verlos entre nubes, fácilmente reconocibles por sus brillos fijos y destacando con respecto a las estrellas. Incluso el esquivo Mercurio se podía ver con mucha facilidad.
A las 7:00 am ya estábamos asomados a la ventana, solo distinguíamos a Venus en el horizonte y en cuanto comenzó a clarear salimos a la terraza. Ahí estaba el pequeño Mercurio, verle por primera vez este año nos ha dado mucha alegría.
Saturno se encontraba en conjunción con la estrella Antares y Marte destacaba muy próxima a Zubenelgenubi. Spica jugaba al despiste ya que estaba entre Marte y Júpiter pero se delataba ella sola con su parpadeo.
Aquí podéis ver una panorámica de la alineación completa, hemos tomado tres imágenes para poder abarcar todos los planetas.
No perdimos la ocasión de disfrutar de este espectáculo al amanecer con los prismáticos, viajar de uno a otro y recrearnos en la espectacular luz cenicienta de la Luna fue más que hermoso, fue un momento que quisimos regalar a nuestro corazón.
Grupo en AstroHita observando galaxias
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